ANASAC CHILE SA: por varias décadas un actor relevante en el aporte a la competitividad del agro chileno

ANASAC ChileSA, es una empresa chilena creada hace 75 años por la Sociedad Nacional de Agricultura, actualmente su propiedad es de la familia Nun. Su inicio fue en el negocio de semillas, para más tarde crecer y diversificarse, agregando nuevas áreas de negocio: a través de sus propias líneas de diferentes productos y representaciones de fitosanitarios, bioracionales, de empresas nacionales e internacionales, producción y exportación de fitosanitarios, y soluciones para casa y jardín. Con esta creación y diversificación de nuevas áreas de negocios y tan diversas, es que los propietarios deciden crear un holding de empresas llamado ANASAC S.A.C.I., el cual en la actualidad tiene varias empresas y filiales tanto en Chile como en el mundo

De la trayectoria de la compañía y su posicionamiento en el mercado nacional e internacional, conversamos con Gabriel Ormeño Hofer, Gerente General de ANASAC Chile, responsable de ANASAC Internacional, Director de Hortus SA y también actualmente presidente de IMPPA A.G.

¿Cuáles son las principales áreas de negocio de la compañía hoy?
ANASAC Chile cuenta con tres áreas de negocio: El área de protección de cultivos compuesta por el negocio de productos fitosanitarios, bioracionales, bienestar vegetal y tecnología, sumado a lo anterior el área de semillas y el área veterinaria. Adicionalmente, ANASAC Chile es responsable de los negocios que la compañía tiene en diferentes países como Brasil, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Centroamérica y el Caribe, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica.

¿Cómo se posiciona ANASAC en el mercado chileno?
Lo más relevante para ANASAC Chile es ser una empresa nacional, cercana a sus clientes, que acompaña, que entiende los “dolores del agro chileno” que a través de sus profesionales con adaptabilidad y flexibilidad le permiten competir de igual a igual a las multinacionales, y me refiero a empresas de I+D. En los últimos años hemos estado siempre posicionados en el top 3 en el mercado chileno.

El rol más importante que juega ANASAC en Chile es ser un regulador del mercado con el objetivo de dar mayor competitividad y a su vez solucionar problemática del agro chileno. Si hoy no existiera una empresa como ANASAC Chile, los precios serían 30 o 40% más altos.  De esta manera, se da una mejor rentabilidad a nuestros productores y agricultores, al poder preferir nuestros productos que están enfocados y varios creados para el agro chileno.

Adicionalmente, al ser una empresa chilena, conocemos los problemas de la agricultura nacional y buscamos soluciones a la medida de los problemas de la agricultura local. Es la gran diferencia con empresas multinacionales, que adaptan alguna solución externa -de otros países- a la realidad chilena.

Nos interesa que al agricultor chileno siempre le vaya bien. Si le va mal, a ANASAC también le va mal. Esa es la cercanía que hoy día tenemos con el agricultor, porque somos una empresa local y tenemos un apego y pasión fuerte a las tradiciones, a la agricultura y a los problemas del sector agrícola del país.

¿Cuál destacaría como el principal logro de la compañía estos años?
Uno de nuestros principales logros es ser uno de los líderes de mercado en protección de cultivos. Nuestros equipos de profesionales junto con nuestra constante innovación han permitido, claramente, tener una preferencia importante de los clientes hacia nuestra compañía.

Partimos con agroquímicos y hoy tenemos toda una línea de bioracionales, aquellos productos que no son de síntesis química, productos naturales que no dejan residuos en la fruta ni en las hortalizas. Somos la compañía que tiene el portafolio más importante de bioracionales en Chile y que seguirá aportando a la creacion de estrategias combinadas entre fitosanitarios y estos.

Asimismo, hace tres años empezamos a ser parte importante de la introducciónn de tecnología y la digitalizaciónn en el agro chileno, logrando en un corto tiempo aportes significativos a travás del proyecto BigFrut.

Hoy día estamos buscando la diferenciación por medio de la sustentabilidad del agro (económica, ambiental y social), poder producir -especialmente en Chile como país productor de fruta- una fruta más sustentable y con menos residuos a cosecha.

Hoy tenemos una estrategia que combina productos de síntesis química, bioracionales y enemigos naturales para el control biológico. A través de la compañía Xilema, propiedad de Anasac, producimos insectos que controlan plagas.

Todo lo anterior hace que hoy seamos la empresa más integral en el concepto de sustentabilidad y así obtener menos residuos en la fruta y/o hortalizas.

En este camino ¿qué ha significado para la compañía pertenecer a IMPPA A.G.?
Para ANASAC es relevante pertenecer a una asociación que agrupe a las compañías que tienen el mismo norte, el mismo foco en buscar soluciones para la agricultura local. Hay muchos problemas que son comunes a la industria y poder tener una asociación para liderar y buscar soluciones como gremio es mucho más fuerte que hacerlo en forma individual.

Asimismo, tener una asociación con profesionales dedicados a buscar soluciones a ciertos problemas es una ventaja, especialmente temas regulatorios, del mercado interno y externo -por ejemplo, los mercados de destino de nuestras frutas y hortalizas-, poder conversar con la autoridad, con empresas exportadoras o empresas recibidoras de fruta, canalizando inquietudes, entre otras gestiones que realiza IMPPA A.G. Claramente, no se logra lo mismo que operar de manera individual.

En este sentido ¿qué ha sido lo más relevante para usted como Presidente de la asociación?
Lo importante es poder transmitir a los socios el objetivo común, que sepan que encuentran en IMPPA un equipo técnico capaz de escuchar y canalizar sus problemas para buscar una solución. Tener una entidad no comercial sino técnica, ha sido uno de los roles más relevantes de mi gestión como Presidente.

Es importante poder entender a cada uno de los socios, cada uno tiene una problemática individual y otra colectiva, por lo tanto, IMPPA tiene que ser articulador y buscar soluciones, éstas pueden ser más integrales o más individuales. Lo importante es que los socios vean el resultado concreto de la gestión que tenemos como asociación, es decir, aquí lo más importante es que cada socio se sienta parte de esta asociación. Y lo otro es que puedan también ser un actor activo, para que puedan aportar su punto se vista profesional.

El sector agrícola del centro-sur del país ha sufrido graves consecuencias de dos sistemas frontales este invierno ¿qué mensaje puede entregar al respecto?
Lamentablemente, esos frentes de mal tiempo están ocasionando problemas, con diferentes grados de repercusión. Es totalmente diferente aquellos huertos que quedaron bajo el agua durante varios días, a aquellos que se vieron afectados durante menos días, incluso más de alguno siendo afectado en los dos eventos climáticos de este año.

Que llueva 300 mm o 400 mm en tres días es mucho y la capacidad de drenaje de los suelos no fue suficiente quedando mucha agua retenida. Dependiente de cuánto tiempo quedó esa agua retenida se pueden producir problemas en las raíces, como bacterias y hongos.

Claramente, el rol que tenemos como industria es tener estrategias y soluciones para poder guiar a los productores.

Posterior a las lluvias, como IMPPA hemos estado trabajando en entregar estrategias preventivas, no curativas porque cuando el problema ya está, es muy difícil poder sacarlo. Hoy todos nuestros asociados, con sus equipos técnicos de especialistas están entregando diferentes soluciones. Nuestra gente está recorriendo los campos, están viendo los problemas y están adelantándose para guiar y orientar a nuestros clientes frente a las posibilidades que esto tenga. El problema no va a suceder inmediatamente después del frente de mal tiempo, el problema vendrá hacia adelante. La dimensión de esto no lo sabemos, pero de que es un tema grave y complejo, sí lo es.

¿Quisiera entregar un último mensaje a los socios de IMPPA A.G.?
Hoy día tenemos un gran desafío como industria frutícola en Chile. Como país enfrentamos una competencia muy dura de nuestros vecinos, como Perú, y tenemos que buscar en forma conjunta soluciones diferenciadoras para poder mejorar la competitividad de nuestra fruticultura.